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La conferencia ofrecida por Miguel Ángel Barrones Buzón, contó con un nutrido grupo de asistentes.
El ponente analizó tres períodos de nuestra historia contemporánea, desde fines del siglo XIX hasta finales del siglo XX. La zona de estudio, el este de nuestra ciudad y el tema de fondo la cuestión agraria.
La primera parte, que él llamo Reformismo nos desgranó un documento donde se exponía, por parte del secretario al Presidente del Gobierno la situación por la que atravesaba el campo andaluz y las condiciones paupérrimas en que vivían los jornaleros, así como la concentración de la propiedad de la tierra entre una minoría de terratenientes; entre las soluciones estaban la construcción de la presa de Guadalcacín.
Tras la llegada de la II República, el Gobierno planificó la expropiación de terrenos que serían indemnizarles y que pasarían a mano de los jornaleros así como otras zonas no indemnizarles. A este acuerdo se opuso la CNT y fue aceptado por la UGT. Las zonas expropiadas se verían que luego coincidirían con las zonas donde se llevaría a cabo la colonización tras el golpe de estado de Franco. Dichas reformas a la postre carecían de financiación económica y junto a la irrupción del franquismo se fue a traste. Esta etapa la definió nuestro conferenciante como de Revolución.
Las contradicciones y oposición a los intentos de solución que la II República planteó a la “cuestión agraria”, llevó en los años 40 y 50 del siglo pasado a intervenir desde el poder para acabar con el problema agrario, reordenar el mundo rural y crear un estado nuevo, “patria” del hombre nuevo en la que el protagonista es el campesino redimido, a través de lo que, desde algunos ámbitos, podríamos definir como contrarrevolución.
Especial relevancia tuvo el término municipal de Jerez, dando lugar a un paisaje cultural peculiar, caracterizado por los pueblos de colonización de nuestra campiña, (El Torno, la Barca, Torrecera, etc.) pero también contribuyó a la capitalización del agro jerezano y a una nueva ordenación social en la que la cuestión agraria ha pasado a un lugar secundario en la actualidad, relegada básicamente a su análisis histórico.
Conferencia muy esclarecedora, con amplia información y documentación de una parte esencial de nuestra zona: La cuestión agraria que tras escuchar atentamente a Miguel Ángel Barrones hemos deducido que no se ha acertado con la respuesta adecuada que necesitaba este sector de la producción tan importante como es el Agro.
Felicidades en nombre del Ateneo de Jerez y del Archivo Municipal por su brillante exposición, los asistentes salieron muy satisfechos.
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