Cineforum Película «Ed Wood»
octubre 17, 2016Proyección documental «DON PABLO, EL MAESTRO ALCALDE»
marzo 28, 2017En la tarde del pasado jueves 1 de diciembre, la sección de cine ofreció una doble sesión. Con motivo de concluir el ciclo Personajes con historia, fue todo un acierto proyectar previamente un documental sobre la vida y obra del personaje en cuestión, que no fue otro que el pintor holandés Rembrandt.
Gracias a este documental, cuya asistencia de público fue magnífica (unas veinte personas), pudimos entender y apreciar mejor la maravillosa película, obra maestra, de Alexander Korda, Rembrandt (1936), que se proyectó a continuación, alcanzándose la cifra de treinta y cinco asistentes.
De mano de la industria británica nos llevó a la época y ambientación del pintor. La historia se sitúa en dos momentos clave de la vida del pintor, primero en 1642, cuando en la cima de su fama debe enfrentarse a la muerte de su esposa. Su fallecimiento le afecta profundamente y vuelve su pintura más oscura, pesimista y dramática, lo que disgusta a sus mecenas y le hace perder encargos y respeto. En 1656 Rembrandt está arruinado, pero conoce a la joven y bella Hendrickje, con la que tendrá una relación extramarital.
Esta relación, que le proporciona momentos de felicidad y le rejuvenece el espirítu, supondrá un gran escándalo en la sociedad de la época, que le acabará condenando al ostracismo…
Todos nos descubrimos ante la portentosa interpretación de Charles Laughton en el papel del pintor, a quien Billy Wilder llamó “el más grande de todos los actores” – quien carga con el peso de una película hecha a su medida y que muestra no al pintor si no al hombre. Las alegrías, penas, contradicciones y pasión del genio, centrándose más en sus relaciones personales que en el pintor como profesional que, tras la muerte de Saskia se replantea su escala de valores y rechaza la vanidad y búsqueda de honores y bienes materiales que le habían acompañado hasta entonces.
Se terminó la sesión con un interesante debate en el que pudimos ratificar todos la excelente película que habíamos presenciado y nos llevamos ese buen sabor de boca con la frase mediante la cual el protagonista concluía su magistral interpretación: “…todo es una vanidad de vanidades”